Me voy junto a Amaia, Edurne y Josetxo a pasar cinco días en Gran Canaria, con un objetivo muy claro: ascender al Morrón de Agujerada, techo de la provincia y seguir sumando cumbres a nuestro proyecto de techos provinciales.
Pero el viaje es mucho más que una cima. Entre senderos y barrancos, disfrutamos del clima amable de la isla, de sus playas y dunas, de los atardeceres sobre el Atlántico, de sus calles y de su gente. Unos días para caminar, descubrir y, sobre todo, para descansar y desconectar de la rutina diaria antes de volver a casa.
Comenzamos la ruta en el aparcamiento del área recreativa de Los Llanos de la Pez (1660 m.), una amplia zona recreativa. Descendemos unos metros y enseguida tomamos el camino, por la izquierda que conduce al Refugio Díaz Bertrana (1.670 m). El día promete y el sendero invita a caminar sin prisas, disfrutando del entorno.
Continuamos hacia la Degollada de los Hornos (1724 m.), donde nos desviamos, unos 600 metros, para visitar la Ventana del Nublo (1694 m.), un arco natural que enmarca el Roque Nublo y el Teide como si alguien lo hubiera colocado a propósito. Parada obligatoria para fotos y para disfrutar del paisaje. Merece la pena acercarse hasta este rincón.
Regresamos al collado de los Hornos y retomamos la subida, pasando por la Degollada de los Gatos (1793 m.). Más adelante abandonamos la senda principal para dirigirnos al Pico de la Catedral (1.919 m.). Una trepada corta, sencilla y evidente nos deja en la cumbre dela tercera altura de Gran Canaria. Desde aquí el panoráma es excelente: frente a nosotros se levanta el paredón oeste del Morro de la Agujerada, vertical y contundente, imponiendo respeto y despertando inevitablemente la curiosidad.
Tras disfrutar de las vistas, desandamos lo subido y regresamos a la senda principal. Vamos acercándonos al Pico de las Nieves, pasamos por la Degollada de Piedras Blancas (1813 m.), y hasta alcanzamos la carretera. Aquí el ambiente cambia por completo: mucha gente, música y ambiente festivo, ya que se está celebrando una prueba cicloturista cuyo final es el propio Pico de las Nieves. Incluso hay una furgoneta vendiendo bebidas y productos típicos, para quien quiera añadir un punto más turístico a la jornada.
Subimos unos metros más y alcanzamos el Vértice Geodésico del Pico de las Nieves (1.950 m). Desde aquí, la vista hacia el Morro de la Agujerada es imponente, un bloque compacto de roca que se impone tanto por presencia como por historia. Junto a la cima destaca la conocida “bola” de las instalaciones militares, un elemento poco afortunado en un entorno tan singular, pero ya inseparable del paisaje.
Durante años se consideró que el Pico de las Nieves era el techo de Gran Canaria, hasta que las mediciones modernas aclararon el dato: el punto más alto de la isla es en realidad el Morro de la Agujerada.
Ascensión al Morro de la Agujerada
Como no tenemos claro el recorrido exacto, decidimos equiparnos con casco y arnés, llevando en la mochila cuerda y material (mosquetones, cintas, etc.) para asegurar tanto la subida como la bajada si fuese necesario. La idea es ver sobre el terreno qué nos encontramos y actuar en consecuencia.
Desde el V.G. del Pico de las Nieves avanzamos hacia la base de esta elegante aguja de roca. En poco más de cien metros encontramos los tornillos de un parabolt, pero sin argolla ni posibilidad inmediata de montar nada, por lo que este primer paso (III) lo realizamos destrepando. Para mí es el paso más delicado del recorrido, ya que al iniciar el destrepe no se ve claramente el final, aunque se hace bien, la roca es firme y ofrece buenos pies y manos.
Antes de continuar conviene observar bien el itinerario. A la derecha se distingue una roca con un pequeño arco, referencia clara del recorrido. Tras el primer descenso avanzamos por una repisa hacia la derecha hasta alcanzar la primera chimenea (II), corta y franca. Superado este punto, seguimos por otra repisa hasta situarnos bajo el arco de roca.
Una vez lo atravesamos, descendemos ligeramente hasta un destrepe expuesto, con una caída importante delante. Es uno de los puntos más delicados del recorrido y obliga a extremar la atención. Tras unos metros de repisa aparece la segunda chimenea (II), algo más larga, pero con buenos agarres.
La travesía continúa con el vacío muy presente a la derecha, obligando a progresar muy pegados a la pared. Tras cambiar de vertiente aparece la tercera chimenea (III), la más larga y aérea de todo el itinerario. A pesar de la exposición, la roca vuelve a ser agradecida y permite progresar con seguridad.
Superada esta última trepada salimos a la arista cimera, ya más cómoda, y caminamos hasta alcanzar la cumbre del Morro de la Agujerada (1.960 m), punto más alto de Gran Canaria. Las vistas son amplias y limpias, destacando el Teide emergiendo sobre el mar de nubes.
Fotos rápidas y un pequeño descanso. Amaia nos espera en la base, así que iniciamos el descenso, que realizamos por el mismo itinerario de subida.
Los destrepes, especialmente en terreno aéreo, requieren más concentración que la ascensión. Con calma, asegurando cada apoyo y sin prisas, descendemos sin incidencias. Ya en la base, solo queda superar el resalte inicial, que escalamos sin problemas, y regresamos al Pico de las Nieves, donde junto con Amaia celebramos este nuevo techo provincial.
Una ascensión corta, intensa y muy estética, que no debe abordarse sin experiencia previa en trepadas expuestas y terreno aéreo. Aunque llevábamos material para asegurar el recorrido, finalmente no fue necesario utilizarlo.
Desde la cumbre del Pico de las Nieves iniciamos el regreso al punto de partida. Caminamos unos metros por la carretera y enseguida nos desviamos a la izquierda para tomar el sendero señalizado. Seguimos hacia la derecha y continuamos todo recto en descenso por un camino poco definido que se abre paso entre el pinar, de esos que obligan a leer el terreno y dejarse llevar por la traza.
Más abajo alcanzamos el Cortijo de Las Huertas (1700 m.), un punto ya familiar, y desde allí solo queda avanzar unos minutos más para regresar al área recreativa de Los Llanos de la Pez, donde cerramos la ruta.
Mapa y track del recorrido al Morrón de Agujerada
Perfil y datos del recorrido al Morrón de Agujerada
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Comenzamos a caminar en el área recreativa de Llanos de La Pez, adonde hemos llegado despues de una hora de coche, por unas carreteras en constante subida, estrecha y muy revirada 
Seguidamente giramos por un marcado camino en dirección al Pico de las Nieves, siguiendo el S-51 y la GR-131
Pasamos junto al refugio Diez Bertrana, cerrado pero que se puede reservar para su uso en la federación de montaña canaria
Salimos a un amplio claro del bosque desde donde tenemos ya grandes vistas, por nuestra izquierda vemos la cúpula redonda del Pico de las Nieves
Y por la derecha vemos a uno de los protagonistas del recorrido, el Roque Nublo y todo su entorno
Seguimos en busca de la degollada de los Hornos
Desde la degollada de los Hornos tenemos una gran vista de los valles que caen hacia el sur
Desde la degollada nos hemos desviado del sendero principal hacia el pico de las Nieves, para disfrutar de la Ventana del Nublo
La Ventana del Nublo un arco natural con grandes vista hacia el Roque Nublo
Desde la Ventana del Nublo observamos por primera vez, al fondo el Teide También desde la Ventana vemos nuestras siguientes objetivos, las cimas del Pico de las Catedrales, Pico de las Nieves y Morrón de Agujerada
Ventana del Nublo con el Roque justo en medio
Abandonamos la Ventana del Nublo y seguimos nuestro camino
Volvemos a pasar por la degollada de los Hornos y seguimos dirección al Pico de las Nieves
Desde la senda vemos el próximo objetivo y vamos pendientes del desvío hacia él
Las vista que tenemos a nuestra espalda es espectacular, de lo mejor del día, Roque Nublo y Teide
Una vez abandonada la senda principal subimos hacia la cima del Picos de las Catedrales, por senda poco definida pero bien marcada
Las nieblas comienzan a cubrir el Pico de las Nieves y el Morrón de Agujerada
En la última parte de la subida, tenemos que superar una pequeña trepada para llegar a la cima
Los valles que caen hacia el sur impresionantes
Foto junto a la cima junto con dos jubilados ingleses
Volvemos a la senda principal desde donde miramos a la cima del Pico de las Catedrales
El gran valle que se abre hacia el sur
Pasamos por la degollada de Piedras Blanca, comentar que todo el recorrido está perfectamente indicado, con poste informativos en todas las degolladas y cruces
Desde la degollada de Piedras Blancas, vemos perfectamente la pared oeste del Morrón de Agujareda, por donde subiremos a la cima y una vez recorrida, podemos marcar, más o menos por donde realizamos la subida, y el posterior descenso
Vistas a los valles del sur desde la degollada de Piedras Blancas
Subiendo hacia la carretera la niebla nos engulle por completo
Y llegamos a la carretera y nos encontramos con la meta de la cicloturista Gran Fondo Pico de las Nieves
Y justo debajo de la cima del pico de las Nieves nos encontramos con esta camioneta que vende multitud de productos
Morrón de Agujerada desde el Pico de las Nieves
Nos equipamos con el arnés y casco y comenzamos el ascenso al techo canario. Los primeros pasos, en medio de la niebla, aunque la niebla nos da una tregua durante el resto de ascensión y el descenso
Desde aquí vemos el agujero y el paso por encima, pero está muy expuesto, y con poco agarre de manos. Así que subimos para realizar el destrepe, por la derecha. Comentar que llevamos la información que se podía rapelar porque había una anilla, pero este día no la había, solo estaban los tornillos del parabol
Josetxo destrepando este primer punto técnico. Es un destrepe expuesto, con una caída importante delante. Es uno de los puntos más delicados del recorrido y obliga a extremar la atención
Una vez pasado el destrepe ya vemos la repisa por la que tenemos que seguir. Comentar que no encontramos ningún hito, pero que el camino se veía pisado, y los pasos se intuían bien.
Recorriendo esta primera repisa, bajando un poco para luego volver a subir en busca del arco
Uno de los pasos claves del recorrido el arco bajo la piedra, por donde tenemos que pasar
Una vez pasado el arco, descendemos hasta una nueva repisa la que nos lleva hasta esta sencilla chimenea
Edurne saliendo de la chimenea con un fondo espectacular
Una vez superada esa primera chimenea, recorremos otra repisa que nos lleva a la siguiente chimenea que nos dará paso a la otra vertiente de la montaña
Saliendo a la otra vertiente de la montaña, y aquí encontramos la última chimenea que nos dejará en la arista cimera
Edurne una vez superada la última chimenea, saliendo a la arista cimera. En esta tercera chimenea encontramos un clavo, para poder asegurar, el único en todo el recorrido
Ya solo nos queda caminar por la arista cimera hasta la cumbre
Fotos de cumbre
Morrón de Agujerada, otro techo provincial más para nuestro proyecto de techos provinciales y van 45/50
Video 3601 desde la cumbre del Morrón de Agujerada
Vista del Pico de las Nieves desde la cumbre, allí vemos a Amaia que nos saluda
Así nos veía Amaia desde el Pico de las Nieves en la cima
Comenzamos el descenso, desandando y destrepando el mismo camino, aquí bajando por la arista cimera
Destrepando la tercera chimenea, esta tercera chimenea (III), la más larga y aérea de todo el itinerario. A pesar de la exposición, la roca vuelve a ser agradecida y permite progresar con seguridad, con muchos y buenos agarres
Panorámica hacia los valles del sur con las nubes entrando y saliendo
Destrepando la primera chimena
Desde la base de la primera chimenea ya vemos el arco por donde tenemos que pasar
Desde la repisa que nos lleva al arco, vemos el Pico de la Catedral y el Roque Nublo
Una vez pasado el arco, tenemos que recorrer la repisa que nos lleva hasta el último obstáculo, la trepada final hacia el Pico de las Nieves
Y esta es la trepada final, o el primer destrepe, un muro de unos cuatro metros, pero que se sube bien, ya que hay buenos agarres
Nuestra llegada al Pico de las Nieves despues de la ascensión al Morrón de Agujerada
Después del almuerzo nos despedimos del Morrón en la cima del Pico de las Nieves
Morrón de Agujerada, una ascensión corta, intensa y muy estética, que nos dejó un gran sabor de boca, aunque que no debe abordarse sin experiencia previa en trepadas expuestas y terreno aéreo. Llevábamos material para asegurar el recorrido, finalmente no fue necesario utilizarlo
Para mi la imagen del día, el Roque Nublo con el Teide
Durante la bajada hacia los Llanos de la Pez, seguimos teniendo la gran imagen
La bajada hacia los Llanos de la Pez la hacemos por medio de un pinar, superviviente de un incendio, estos pinos canarios se queman y vuelven a revivir
Y llegamos al campamento Cortijo de Las Huertas, varias cabañas de madera lo componen
Y seguidamente ya vemos los coches aparcado en Llanos de la Pez, final de nuestro recorrido
Después de una merecida comida en Tejada, nos vamos a visitar la montaña Cabreja, que debe su nombre a Francisco de Cabrejas, un caballero que llegó a estas tierras allí por 1545, y con el cual comparto pueblo de procedencia, Cabrejas del Pinar.
Vistas de Las Palmas, capital Gran Canaria, desde la montaña Cabreja
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